Otros productores se resienten. Ellos están peleando
para que la Corte Suprema declare nula esta ley. En cuanto al pobre consumidor, dependiendo del tipo de uva
y del año, paga un 10 al 50 % más de lo que paga el consumidor europeo.
El precio de las uvas depende de su calidad y para que
se cultivan. Las uvas para vinos de alta calidad valen mucho más que las uvas para
hacer pasas. La ley norteamericana regula el mercado de las uvas pasas. Pero si
los agricultores reciben precios elevados por uvas pasas entonces van a sembrar
más uvas de este tipo.
Creo que debe tener un impacto en el precio de las
uvas en general. Si no, no entiendo cómo es posible ver una diferencia de
precios tan alta, sobre todo cuando consideramos que en Estados Unidos hay
mucha tierra, el precio del combustible y el agua son menores que en España, y
para colmo ellos utilizan la labor de inmigrantes ilegales a los cuales
explotan sin misericordia.
El Economista tiene un artículo sobre este tema. Yo compro esta revista de vez en cuando pero no
la recomiendo porque los dueños son neocón, lo mismo que Aznar, Blair, Bush y ahora el canadiense Harper.
El artículo describe un caso ante la Corte Suprema de
los EEUU, donde Marvin D. Horne y colaboradores le suplican a la Corte Suprema que ordene al
Departamento de Agricultura que los deje tranquilos y no les pasen mas cuentas
por las uvas que debían haber entregado gratis en el 2003.
Verán, la ley de control de las uvas pasas crea una comisión
de 47 agricultores y 1 consumidor. Esta comisión decide cada año la cantidad de
uvas que el gobierno va a expropiar para que no lo vendan los agricultores
individualmente. La comisión vende parte de lo que expropia, a veces lo regala,
y a veces lo exporta.
Horne el rebelde
En el 2003 dijeron que iban a expropiar
el 43 % de la cosecha. Esto enfureció a un grupo de
agricultores en California liderizados por el Sr Horne. Ellos empezaron a vender la cosecha sin
enviar las uvas expropiadas al gobierno. El Departamento de Agricultura reaccionó
y les pasó la cuenta por las uvas que habían vendido (la proporción que debían haber
entregado gratis al gobierno). Así se armó
el peo legal, pues los agricultores se resistieron, y el caso ha estado dando
vueltas por el sistema judicial desde entonces.
El problema finalmente ha llegado a la Corte Suprema,
la cual debe decidir si el gobierno de los EEUU tiene el poder para obligarlos a que entreguen una fracción de su cosecha
gratis, para después ver si la famosa comisión les paga algo.
Me parece que la ley es tonta. Primero porque obliga
al agricultor a entregar parte de la cosecha sin saber cuánto le van a pagar
eventualmente. Segundo porque aumenta el precio de las uvas para el consumidor.
Tercero porque aumenta el precio de las uvas que se utilizan para hacer vino. Y
esto quiere decir que el vino en Estados Unidos cuesta más que en España. Lo
cual me parece bien para la industria española, porque Estados Unidos es un
competidor más débil en este campo en el mercado internacional.
La ley no beneficia a todos los agricultores. Si lo hiciera,
no creo que Marvin D. Horner y sus compañeros
hubiesen continuado el pleito por diez años hasta llegar a la Corte Suprema. Deben estar muy molestos con el sistema
reinante, y han peleado hasta el final.
¿Quién se beneficia?. Supongo que grandes agricultores
que son miembros de la comisión. Y las empresas que envasan y mercadean las uvas
pasas. No me puedo imaginar quien más se beneficia si el mercado se
estrangula para elevar los precios.
Qué remedio le queda al Sr Horne y sus amigos si no
ganan el pleito? Van a tener que convencer al congreso que cambie la ley. Y
como en EEUU los partidos reinantes se están cayendo a tiros por tonterías, no
creo que esto vaya muy lejos. Veremos lo que dice la Corte Suprema, y mientras
tanto tomen vino español, es mejor que el de California y cuesta menos.
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